Pero…¿qué es la glicerina? Se puede responder que la glicerina vegetal es agua. No se dirá ninguna mentira, pero tampoco toda la verdad.
La glicerina se extrae de la fermentación de algunos aceites vegetales (coco, maíz, nogal, laurel, oliva, aguacate etc.) que, posteriormente, son sometidos a la hidrólisis. Un procedimiento bioquímico por el cual se separa una sustancia orgánica por la acción del agua. O, dicho de forma sencilla, los aceites vegetales pierden casi toda su densidad y el resultado es un líquido, más o menos untuoso, que se llamará glicerol. Un producto muy utilizado en medicina y en tratamientos dermatológicos.
Se pueden sintetizar cuatro propiedades fundamentales de la glicerina vegetal:
Humectante. Absorbe y conserva la humedad. Es decir, contribuye a la hidratación de la piel y ayuda a que dicha humedad se mantenga de forma prolongada.
Hidrosoluble. Se puede disolver perfectamente en el agua sin que pierda ni un ápice de su pureza. Ello significa, por ejemplo, que es ideal para combatir los efectos de la humedad en el cabello ya que absorbe el vapor de agua ambiental.
Insípida. Carece de sabor. Esta es una de las razones por las que el uso de la glicerina es básico en multitud de productos de la industria alimentaria-bio. Se aprovechan todas sus propiedades sin alterar el gusto del producto en concreto.
Emoliente. En casos de eczemas, irritaciones o escamaciones de la piel –muy común en manos- la glicerina funciona como base de todos los tratamientos dermatológicos, precisamente por su acción suavizante y protectora.
Ahora bien, para la fabricación de jabones aunque se utiliza la misma glicerina se añade parte de la materia orgánica que, necesariamente, se libera en el caso de la glicerina líquida. Así pues, se consigue una base semisólida que nos permitirá, mediante un juego de temperaturas, incorporar esencias y colorantes naturales.
Glicerina vegetal transparente, aceites esenciales puros y colorantes ecológicos. Esta es la base de los jabones de Sabó de Barcelona. Producto de proximidad, sostenible y respetuoso con el medio ambiente. Los jabones de Sabó de Barcelona están pensados con un único compromiso: el cuidado y protección de tu piel.